Según datos de Statista, el ecommerce en el Perú -sin considerar travel y ventas consumer to consumer- creció 40% versus el 2019 hasta llegar a los 3 mil millones de dólares en el 2020, acelerando casi 4 años de crecimiento en un solo año.

Cambios de comportamiento del usuario

La madurez del Comercio electrónico en un mercado se puede medir en base a 5 etapas, ello según el tipo de productos que se compran: 

  • 1° etapa: Compra de productos de entretenimiento como juegos online, donde el beneficio que se recibe es inmediato.
  • 2° etapa: Compra de productos de viajes y turismo.
  • 3° etapa: Compra de productos durables como electrodomésticos, a diferencia de las etapas anteriores a partir de aquí el tema logístico se vuelve primordial.
  • 4° etapa: Compra de productos no-perecibles como abarrotes.
  • 5° etapa: Compra de productos perecibles como frutas, carnes, verduras, etc.

En la era pre-Covid el Perú se encontraba en la tercera etapa y recién pasando a la cuarta, pero el Covid-19 volvió habitual la compra de productos perecederos y no perecederos. A ello, debemos sumarle el crecimiento exponencial de la compra de productos de la categoría electro.

Al no poder predecir este crecimiento los retailers tuvieron muchos problemas especialmente en la entrega, evidencia de ello es que las quejas y devoluciones alcanzaron un récord histórico el año que pasó según información del Indecopi.

Respuestas y oportunidades

Pero como todo problema genera oportunidades los retailers más maduros pertenecientes a la categoría de Tiendas por Departamentos (Saga, Ripley, Oechsle, etc) lanzaron Dark Stores -lugares donde almacenar los productos a despachar, implementaron Click & collect  para comprar online y recoger en tienda y generaron alianzas con empresas de última milla y/o operadores logísticos para suplir la demanda.

Además, muchas empresas acostumbradas a vender a través de Centros Comerciales se unieron a marketplaces, lanzaron sus ecommerce y se aliaron con empresas de logística especializadas en tiempo récord.

Por otro lado, las startups, acostumbradas a tener una cultura que abraza el cambio y la incertidumbre, supieron sacar provecho de esta situación. Por ejemplo empresas como Freshmart -dedicada a la venta de productos perecederos y no perecederos- vio un incremento del 355% en sus ventas versus el 2019.

Finalmente, no podemos dejar este artículo sin hablar de las billeteras electrónicas: Yape y Plim fueron grandes aliados de las bodegas y pequeños negocios a fin de ayudarlos en sus cobros. De hecho Yape indicó que cuenta actualmente con más de 1 millón de micronegocios afiliados.


Se estima que el ecommerce en el Perú continuará creciendo a un ritmo de 12% anual hasta el 2024, por lo que tanto los retailers que recién empiezan en ecommerce como los más maduros tendrán desafíos para ampliar su base de clientes, generar compras recurrentes, lograr eficiencias en costos, mejorar los procesos de devolución y trabajar más allá de la venta promocional. ¡La mesa está servida!